Los agricultores rumanos acusan de competencia "desleal" a los ucranianos.
Continúan las protestas en el paso fronterizo deSiret, en el norte de Ucrania, bloqueado desde hace cuatro días por los agricultores. Ni un solo camión procedente de Ucrania entra en el país, y sólo 10 salen de Rumanía cada hora.
Los agricultores acusan a las autoridades de hacer la vista gorda ante las importaciones baratas de cereales procedentes de Ucrania, lo que aseguran que les ha llevado al borde de la quiebra.
"'No guardemos los cereales aquí y no tengamos esta competencia aquí, y reduzcamos los precios de los cereales y los impuestos especiales sobre el diésel! ¡Y que los subsidios se entreguen a tiempo. No sólo promesas y más promesas", dice Angelica Gradinaru, agricultora del Condado de Suceava.
130 camiones procedentes de Ucrania pasaron por la aduana, pero se quedaron atascados a unos cientos de metros de la carretera. Los agricultores no quieren dejar pasar la mercancía, sino compartir lo que tienen con los conductores ucranianos: té o comida.
Según el Gobierno, desde octubre de 2023 hasta la fecha ningún grano ucraniano ha entrado por tierra en el mercado interior rumano. Los cereales sólo han entrado en el puerto de Constanza, afirmó el primer ministro de Rumanía, Marcel Ciolacu.