En una reunión crucial en La Haya, los líderes de la OTAN buscarán acordar un gasto del 5% del PIB en Defensa, un objetivo que plantea desafíos para muchos países miembros.
Los líderes de la OTAN se preparan para acordar un objetivo histórico de gasto militar en su reunión de La Haya, considerada la más importante de la Alianza desde su fundación.
Alcanzar un objetivo de gasto del 5% del PIB supondría un enorme salto para la mayoría de los miembros de la OTAN, ya que en la actualidad la inmensa mayoría invierte menos del 3% en Defensa. Las únicas excepciones son Polonia (4,12%), Estonia (3,43%), Estados Unidos (3,38%), Letonia (3,15%) y Grecia (3,08%), según estimaciones del Atlantic Council.
¿Qué hay en ese 5% y cuál es la parte controvertida?
La mayor parte es un 3,5% del PIB para "gastos básicos de Defensa", como tanques, jets, drones, soldados, toneladas de nueva munición de artillería y, por supuesto, tropas. Pero el 1,5% restante deja más interrogantes. La OTAN lo denomina "inversiones relacionadas con la Defensa y la Seguridad".
Es decir, infraestructuras civiles e informáticas diseñadas para impulsar y apoyar las operaciones militares, como puentes, carreteras y puertos, almacenamiento, así como ciberseguridad y protección de conductos energéticos. Sin embargo, los expertos sostienen que esta parte del presupuesto es vaga y está abierta a interpretaciones nacionales.
"Con las diversas tradiciones de preparación civil de los Estados miembros, se corre el riesgo de una contabilidad creativa y una priorización oportunista, al tiempo que se obstaculiza la cooperación", dijo el 'think-tank' alemán Bertelsmann Stiftung.
"Si el objetivo del 1,5% no consigue mejoras mensurables en la capacidad de resistencia europea, podría resultar contraproducente y tensar la confianza transatlántica". "La OTAN debería establecer un proceso estructurado de planificación de capacidades que refleje su proceso de planificación de capacidades de Defensa, con objetivos claros para toda la alianza".
¿Es vinculante el objetivo de gasto?
El problema está en los detalles. Una carta de la OTAN enviada el domingo al presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, parece sugerir que el objetivo del 5% podría no ser vinculante.
España, dice la carta, "tendrá la flexibilidad de determinar su propio camino para alcanzar los objetivos de capacidad establecidos por la OTAN", y es posible que otros países hagan las mismas peticiones.
Además, algunos aliados podrían considerarlo como un permiso para asignar menos del 5%, si pueden demostrar que, a pesar de todo, están cumpliendo los objetivos de capacidad (cuya lista permanece clasificada). La reafirmación de la OTAN se produjo después de que España expresara su preocupación por unos objetivos de gasto "poco razonables".
"Destinar el 5% del PIB a Defensa frenaría el crecimiento económico por un aumento de la deuda", ha dicho el primer ministro. El país gasta actualmente alrededor del 1,28% de su PIB en Defensa, uno de los porcentajes más bajos de la alianza. El nuevo acuerdo de la OTAN obligará a los países a aumentar su gasto hasta el 5% del PIB en 2035, con una revisión de la "trayectoria de gasto" de los aliados a mediados de 2029.