"Una pizca de Francia en el espacio", dice la Agencia Espacial Europea, que presenta una iniciativa sin precedentes: cuando vuele a la ISS en 2026 en el marco de la misión "εpsilon", la joven astronauta francesa llevará consigo platos de autor del chef con más estrellas Michelin del mundo.
Las dos francesas dan un nuevo significado a una expresión común: "El cielo es el límite".
Según ha anunciado la Agencia Espacial Europea, Sophie Adenot (que el año que viene volará a la Estación Espacial Internacional con su compañero de promoción de 2022 Raphaël Liégeois) ha trabajado con la chef francesa Anne-Sophie Pic para elaborar los platos "extra" que llevará a bordo de la ISS.
Nada de sucedáneos poco apetitosos en el fondo del tubo para esta representante de la patria de la alta cocina: como señala la ESA, Sophie llevará al espacio un pedazo de la gastronomía francesa con un menú especial creado con Anne-Sophie Pic, la chef con más estrellas Michelin del mundo. Los platos seleccionados - "primas", no el menú completo- son emblemáticos de la cocina francesa, pero han sido completamente revisitados, como:
- Sopa de cebolla y bayas rosas con picatostes gratinados
- Aves con pimienta voatsiperifery, haba tonka y polenta cremosa con queso comté
- Crema de chocolate con flor de cazette y café
Anne-Sophie Pic, señala la ESA, es una de las figuras más destacadas de la alta cocina, que amplía constantemente los límites del gusto y la emoción con sus atrevidas creaciones y su enfoque intuitivo. Su restaurante Pic de Valence (Francia), galardonado con tres estrellas, ganó el premio "Best Restaurants" de Tripadvisor en 2024. También fue nombrada mejor chef femenina del mundo en 2011 por los premios San Pellegrino World's 50 Best Restaurants.
"Es un gran reto el que me ha ofrecido Sophie Adenot y es bastante extraordinario", comentó Anne-Sophie Pic, la chef de Drôme con tres estrellas Michelin, en el ICI Drôme Ardèche el jueves 3 de julio por la mañana.
Cuando "el invierno pasado" el astronauta le pidió que preparara platos festivos para la ISS, la chef "no dudó ni un segundo en decir que sí". Estos platos extras representan el 10% de las comidas de los astronautas en el espacio. " Es un poco de cocina excepcional para darles ánimos", sonríe Anne-Sophie Pic.
Bisque de marisco, crème de foie gras esprit, sopa de cebolla con bayas rosas, ternera estofada effiloché, arroz con leche y crema de chocolate con avellanas y café: "El objetivo es darles a probar cosas que les gustan". Pero para ir al espacio, "estos platos tienen necesariamente una textura determinada", explica Anne-Sophie Pic. "Es cocina clásica, pero al final, estos platos se reestructuran, se mezclan y se cocinan a fondo para eliminar cualquier problema bacteriano" y para que sean "fáciles de comer".
"Tiene que ser bastante compacto", pero, como señala el chef, "puede ser extremadamente bueno y sabroso". Los alimentos se envasaron en colaboración con Servair, una empresa francesa especializada en catering aéreo, mediante esterilización en bolsitas flexibles para preservar las cualidades gustativas y garantizar al mismo tiempo una conservación muy prolongada a temperatura ambiente.
Adenot, de 42 años, ex piloto de pruebas de helicópteros, realizará su primera misión a bordo de la ISS en la primavera de 2026. Durante una misión de seis meses denominada εpsilon, realizará diversas tareas, entre ellas experimentos científicos de iniciativa europea, investigación médica y mantenimiento de la estación.
Al viajar a una velocidad de 28.800 km/h a unos 400 km sobre la Tierra, la ISS completa unas 16 órbitas alrededor del planeta cada día, lo que puede dificultar la distribución de desayunos, almuerzos y cenas, señala 'The Guardian'.
Los astronautas suelen hacer tres comidas al día, con una ingesta calórica diaria de 2.500 calorías como guía aproximada. Debido a los requisitos especiales de conservación e higiene de los alimentos, alimentar a un astronauta puede costar más de 20.000 euros al día. Según la ESA, los alimentos suministrados a bordo de la Estación Espacial Internacional deben ser inalterables, ligeros y tener una caducidad mínima de 24 meses.
La mayor parte de los menús en el espacio consisten en comidas enlatadas o liofilizadas en envases de plástico que los astronautas pueden seleccionar de una lista predefinida de opciones proporcionada por las instituciones. Las frutas y verduras frescas son un lujo y sólo están disponibles cuando llega una nave espacial con nuevos suministros.
La gastronomía tradicional en el espacio podría no ser patrimonio de la ciencia ficción, prosigue 'The Guardian'. El pasado mes de abril, la ESA anunció un proyecto para evaluar la viabilidad de producir alimentos cultivados en laboratorio en condiciones de baja gravedad y alta radiación, en órbita y en otros planetas.
El equipo implicado afirmó que el experimento era un primer paso hacia el desarrollo de una pequeña planta piloto de producción de alimentos a bordo de la ISS en un plazo de dos años, lo que permitiría a los futuros astronautas franceses fabricar baberos impresos en 3D y patatas fritas cultivadas en laboratorio.