El Restaurante Chirón ofrece la posibilidad de acercar la comida de más alto nivel a prácticamente cualquier comensal sin necesidad de pensar en vender un riñón o pedir un préstamo para vivir la experiencia de un restaurante con estrella Michelin y dos soles Repsol.
A menos de media hora de Madrid se encuentra el Restaurante Chirón, situado en Valdemoro. Se trata de una opción de lo más recomendada y además de lo más económica para contar con tal reconocimiento desde 2013.
Chirón cuenta con un Menú Ejecutivo por 39 euros, una opción sorprendente para un establecimiento de esta categoría. Si quieres disfrutar de la mejor gastronomía junto a familiares y amigos, esta opción es indudablemente de las mejores.
La mayoría de los menús de los restaurantes de este nivel suelen tener un coste superior a los 100 euros llegando a cifras de más de 300 euros si nos fijamos en restaurantes del estilo Diverxo o el Restaurante de Martin Berasategui con tres estrellas Michelin, restaurantes que he visitado previamente, y ha requerido un periodo previo de mentalización y ahorro para visitar.
La propuesta de Chirón es, cuanto menos, atractiva y más si conoces el proyecto y su apuesta por el producto local. Antes de nada quiero aclarar que reservé de manera personal y pagué de mi bolsillo la cuenta, para disipar cualquier duda sobre mi criterio.
Un proyecto familiar con estrella Michelin
El restaurante está dirigido por el chef Iván Muñoz. Su filosofía es clara: trabajar con producto de temporada, reinterpretar los sabores tradicionales de la zona y hacerlo todo desde un respeto absoluto a la materia prima. El resultado es una cocina elegante y perfectamente reconocible.
Chirón se encuentra en la calle Alarcón, 27 en Valdemoro, a tan solo 25 kilómetros de Madrid, por lo que es una opción ideal para disfrutar de la gastronomía sin irte demasiado lejos de la capital de España. Se trata de lo que parece un antiguo domicilio de una planta cuya planta alta ha sido remodelada para alojar el restaurante, repartido en dos salones.
Este restaurante cuenta con una estrella Michelin (que ostenta desde 2013) y dos soles Repsol que han sido renovados en 2025. Se ha consolidado como una referencia en la alta gastronomía. Su propuesta culinaria combina tradición madrileña con técnicas modernas, ofreciendo experiencias que destacan por su calidad y accesibilidad económica.
La cocina del chef Iván Muñoz se inspira en las vegas de los ríos Tajo, Jarama y Tajuña, llevando al plato productos de cercanía que reflejan la riqueza gastronómica de la comunidad. "Es la pasión y el esfuerzo de un restaurante familiar que conserva la esencia de la cocina, pero desde un prisma más personal", explica en su página web.
Con la salvedad de platos clave como el yogur de morcilla o un extra de un arroz socarrat con vieira y alioli, la carta de Chirón varía y muchos de sus platos son de temporada. Es un menú tradicional atravesado por toques manchegos y recetas madrileñas, con la capacidad del chef para reinterpretar otros sabores. De hecho, en 2020 ganó el Concurso Internacional de Cocina Creativa de la Gamba Roja de Dénia.
El Menú Ejecutivo: ¿alta cocina por 39 euros?
Chirón ofrece en su carta el llamado Menú Ejecutivo por 39 euros, disponible de martes a viernes para el horario de comida. Este menú incluye snacks, aceite de Madrid, pan artesano, aperitivo, entrante, pescado, carne, postre. El Menú Ejecutivo varía según temporada y disponibilidad de la materia prima. El día que acudimos a comer este fue el menú que comimos. Aquí los entrantes:
- Aceituna del vermout.
- Brandada de bacalao acompañada de sus torreznos.
- Croqueta melosa de leche de oveja y jamón ibérico.
- Yogur de morcilla.
- Aceite de Madrid con una mantequilla de elaboración propia de espinaca con pan blanco de masa madre y otro de amapola.
La experiencia es de estrella Michelín, con todo el servicio uniformado, en este caso con un traje gris claro con corbata verde y camisa blanca. Antes de empezar nos preguntan por intolerancias, aunque es algo que puedes poner cuando reserevas.
Para cada plato servido nos ofrecen una explicación del mismo, su elaboración y una recomendación de cómo consumirlo. Con cada plato hay un cambio de cubierto. La vajilla está muy cuidada con platos que parecen piezas únicas que parece extruídas en roca a otros tan simples como el vaso de yogur.
En nuestro caso optamos por agua como bebida durante la comida aunque tomamos algo antes mientras esperábamos. Una vez te quedas sin agua vienen a servirte al igual que con el pan, que se sirven inicialmente con el aceite y mantequilla.
De los entrantes puedo comentar que la aceituna parece una aceituna gordal rellena y tiene un claro sabor a vermú como si te la tomaras justo cuando acabas la bebida. La brandada de bacalao fue una sorpresa no tanto por la brandada en sí, que en un formato cremoso tenía un sabor muy suave y reconocible; sino más bien por los torreznos que son realizados con la piel del bacalao y tienen un claro sabor a torrezno.
La croqueta tiene un potente sabor y quizá si está acostumbrado a tomar croquetas sea un sabor reconocible y no tan destacado como otros entrantes. Eso no quita el punto de que esté deliciosa. Para mí, que tengo familia en Jaén, y estoy acostumbrado a buen aceite, el que probamos era de muy buena calidad, mezcla de arbequina y cornicabra. El poder mojar pan, y poder probarlo con dos distintos propone un toque de juego y descubrimiento de los distintos matices muy interesante.
La mantequilla con un toque de sal en la parte superior y ese tinte verde que le da la espinaca es curiosa y en el sabor se nota ligeramente, incluso si no te gusta la espinaca es muy probable que esta elaboración le sorprenda gratamente.
Para mí la gran sorpresa de estos entrantes fue el yogur de morcilla, un clásico del restaurante. Viene presentado como un yogur tradicional en vaso de cristal, el tradicional de chocolate con nata. En este caso es un trampantojo en el que la nata es realmente un puré de patata muy suave y el chocolate pasa a ser una crema de morcilla con trozos de pera que le dan un toque dulce. Esta mezcla de sabores y texturas es muy equilibrada, sin una morcilla omnipresente, y en mi caso, tras probarlo entendí el porqué es uno de los clásicos de la casa.
Los platos principales que tomamos fueron:
- Guiso de lenteja beluga con toques morunos, pato y foie.
- Caballa en mojete de tomate, emulsión de sus espinas y arbequina.
- Carrillera de ibérico lacada al vino acompañada de boniato en texturas.
El guiso de lenteja es un plato que con la llegada del frío apetece. Chirón la presenta en un pequeño cazo/sartén. Tiene un sabor de guiso tradicional pero tanto el foue como la piparra le da un toque distinto. No es una reinterpretación de un plato total, sino más bien, un aderezo que le sienta muy bien.
El plato de caballa, estaba muy bueno, acaban la elaboración en la mesa con un aceite con pimentón que le echan con una cuchara por encima. Es quizá el plato que menos me sorprendió de todo el menú, pero el punto y la mezcla de sabores con el mojete de tomate me gustó.
La carrillera cierra los segundos sobre una cama de puré de boniato y boniato rallado en la parte superior. La salsa reducida de vino prácticamente se carameliza y el punto de la carne es perfecto, casi deshaciéndose en la boca. Dan ganas de pedir más.
El postre incluye una tarta de zanahoria especiada, vainilla y sorbete de mandarina que viene presentada en una pequeña maceta y con una zanahoria baby como si de un pequeño huerto se tratara. El sabor, cogiendo una cucharada de las tres capas, es algo que tiene que probar ya que seguramente sea la mejor tarta de zanahoria que he probado.
Para cerrar el menú nos ofrecen unos dulces como una gominola de frutos rojos y un pequeño bizcocho de mantequilla con centro de fresa. Aquí optamos por pedir unos cafés para degustarlos.
Las bebidas van aparte del precio. Tienen la opción de agua y pan por 3,5 euros. Las bebidas varían en precio desde refrescos por 3,5 euros hasta vinos y cócteles que van de 5 y 19 euros el maridaje de tres vinos. Entre ellas destacan varios vinos de la Comunidad de Madrid, el vermout o la cerveza lager elaborada en exclusiva para Chirón.
Por 14 euros adicionales también puedes añadir un arroz socarrat de vieira y alioli, algo que elegimos como extra para compartir y lo recomiendo encarecidamente si te gusta la paella y esa parte donde el arroz se queda pegado. Te lo presentan en modo canelón, con una fina capa de socarrat enrollada, una vieira y una pincelada de alioli.
Otras opciones de menú degustación
Aunque algo menos económicas, el restaurante estrella Michelin ofrece otras alternativas disponibles para cenas y comidas el fin de semana:
- Menú Clásicos, disponible para cenas con un precio de 58 euros donde han concentrado los platos más típicos, y ya clásicos, del restaurante Chirón como por ejemplo ese arroz socarrat que pedimos aparte, una sobrasada vegetal o la pechuga de pato ahumada.
- Menú Degustación Tajo: 120 euros, que incluye un mayor número de pases más elaborados como curry verde de vega o bien un cocido de taba marino. Solo aclarar que todos los precios son sin IVA. Un 10% que se añade al precio marcado, por lo que sin necesidad de engañar a nadie, los precios finales a pagar sin bebida serían de:
- Menú Ejecutivo: 42,9 euros.
- Menú Clásicos: 63,8 euros.
- Menú Degustación Tajo: 132 euros.
¿Por qué ir, o no, a Chirón?
Chirón representa una idea descartada por muchos cocineros de estrella: es un restaurante al que volver. No necesita multiplicar por dos los precios tras recibir la condecoración Michelin, y mantiene su excelencia año tras año desde 2013.
Los precios han aumentado junto con la inflación, ya que inicialmente fue un menú que vio la luz por menos de 30 euros, pero han pasado 12 años. En este tiempo una subida de nueve euros es más que razonable por el precio de los productos.
El restaurante cumple con la santa trinidad que define su propuesta: recetario tradicional, influencia de otras cocinas mundiales y producto de cercanía. Todo ello en un ambiente elegante sin virguerías, que conserva el carácter familiar y acogedor.
Las reservas se realizan a través de su página web. En caso de solicitar menús especiales o reservas con menos de 24 horas de antelación, puedes llamar al teléfono 918 95 69 74.
Si vive en Madrid o está de paso, a mi parecer merece la pena visitar este restaurante de Valdemoro. Chirón es el ejemplo perfecto de cómo un proyecto familiar puede alcanzar la excelencia sin perder la cercanía, demostrando que para disfrutar de la alta cocina no siempre hay que desembolsar una fortuna. En mi caso, aquí la prueba gráfica dos menús en un estrella Michelín, con el extra del socarrat, con dos bebidas, agua, pan, dos cafés por 109 euros. 54,55 euros por persona y, no, para los que aún duden, no salimos con hambre.
Y para cerrar el artículo y que nadie me tache de mentiroso, a fecha del 15 de noviembre de 2025, se puede comer el Menú Ejecutivo, en Chirón, un restaurante con estrella Michelin y dos soles Repson, por un precio de 39 + IVA (10%): 42,9 euros. Yo les dejo aquí, creyendo firmemente que podría alimentarme toda la vida de esa carrillera y el yogur de morcilla.