Los investigadores analizaron más de 1.700 inundaciones para desentrañar los efectos del cambio climático, la exposición y, sobre todo, cómo adaptarse mejor a ellos.
Las muertes por inundaciones en Europa se han reducido en un 52% desde 1950, gracias a soluciones como los sistemas de alerta temprana y la preparación ante emergencias, según un nuevo estudio del Instituto Potsdam para la Investigación del Impacto Climático (PIK).
Este tipo de medidas de adaptación no estructurales también han reducido las pérdidas económicas por inundaciones en un 63%. Y ello a pesar de que el número de personas afectadas por las inundaciones en Europa ha aumentado un 8% debido al cambio climático en el mismo periodo.
"La protección contra las inundaciones y otras medidas de adaptación han contrarrestado en gran medida el creciente riesgo de inundaciones derivado de la expansión hacia las llanuras aluviales y el cambio climático en todo el continente desde 1950", afirma en un comunicado de prensa Dominik Paprotny, investigador del PIK y autor principal del estudio.
"La vulnerabilidad se ha reducido significativamente, pero el progreso en la adaptación ha sido más lento en los últimos 20 años, lo que indica la necesidad de esfuerzos adicionales para prevenir un aumento de las pérdidas por inundaciones debidas al cambio climático en el futuro".
Los científicos analizaron décadas de datos sobre inundaciones
Los investigadores analizaron 1.729 inundaciones ocurridas en todo el continente entre 1950 y 2020. Las compararon en escenarios con y sin cambios climáticos y socioeconómicos a lo largo de las siete décadas.
Utilizando datos históricos sobre los daños causados por estos sucesos, pudieron calcular el nivel de protección ofrecido por adaptaciones como diques, presas, sistemas de alerta temprana y cambios en la normativa de construcción.
Las pérdidas económicas totales casi se duplicaron, pasando de 37.000 millones de euros entre 1950 y 1960 a 71.000 millones en la última década. El crecimiento del producto interior bruto significa que el impacto económico real ha disminuido significativamente en términos porcentuales, ascendiendo a un tercio de lo que era en la década de 1950. En resumen, el PIB europeo creció a un ritmo mucho más rápido que los daños económicos de las inundaciones.
¿Qué está provocando los daños por inundaciones en Europa y qué ha contribuido a reducir su impacto?
El aumento de la exposición a las inundaciones, más personas o edificios en zonas propensas a las inundaciones, fue el principal impulsor del aumento de los daños por inundaciones.
El cambio climático ha aumentado las pérdidas económicas y las poblaciones afectadas en un 8% y las víctimas mortales en un 1%. Su impacto es especialmente acusado en el noroeste y partes del sur y este de Europa. Otros factores como la urbanización, el crecimiento de la población, el crecimiento del PIB y los cambios en el uso del suelo también han influido.
La reducción de la vulnerabilidad resultó ser el factor atenuante más importante. Medidas como la mejora de las normas de construcción, los sistemas de alerta temprana y la preparación ante emergencias redujeron el impacto entre un 39% y un 63% desde 1950 y hasta un 75% en la década de 2010.
Las infraestructuras de protección contra las inundaciones, como presas, diques y diques, también han desempeñado un papel fundamental. El estudio estima que estas defensas estructurales han reducido el efecto de las inundaciones entre un 14% y un 21%. En la década más reciente (2011-2020), este efecto protector aumentó, reduciendo los impactos hasta en un 38%.
Los autores del estudio señalan que es probable que estas cifras también sean una subestimación, ya que el análisis sólo incluyó las inundaciones que se habían producido realmente, es decir, aquellas en las que las defensas contra inundaciones se vieron desbordadas. No se tienen en cuenta los casos en los que las aguas quedaron totalmente retenidas por las defensas.
La adaptación tiene sus límites
Aunque la investigación demuestra que los métodos de adaptación han sido eficaces, los investigadores advierten de que los daños que pueden evitar tienen un límite. "A medida que aumenta el calentamiento, nos acercamos a esos límites", afirma en un comunicado de prensa Katja Frieler, coautora del estudio. Europa se está calentando el doble de rápido que la media mundial, según el monitor climático de la UE Copernicus.
En los últimos cuatro años, el continente ha sufrido varias inundaciones especialmente graves, como las del valle del Arh en Alemania en 2021. Cuando el río se desbordó, murieron casi 190 personas y pueblos enteros fueron arrasados, causando unos daños económicos estimados en 33.000 millones de euros.
En 2024, Europa sufrió las inundaciones más extensas en más de una década, según informó Copernicus en abril. Casi un tercio de sus ríos crecieron hasta desbordarse durante uno de los años más lluviosos desde 1950.
Las inundaciones de Valencia (España) a finales de octubre causaron 232 muertos y unos daños económicos totales estimados en unos 10.700 millones de euros. En conjunto, las tormentas y las inundaciones mataron a más de 300 personas el año pasado y afectaron a 413.000 más en todo el continente. Infligieron al menos 18.000 millones de euros en daños económicos.
Los autores del estudio afirman que por ello es importante seguir de cerca los efectos del cambio climático y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero para mantenerlas dentro de límites manejables, además de supervisar los avances en las medidas de adaptación.