Los eurodiputados se solidarizan y paralizan la sesión plenaria
Los intérpretes del Parlamento Europeo están en huelga.
Protestan porque han cambiado sus condiciones de trabajo: el tiempo que pueden permanecer en la cabina de intepretación ha pasado de siete a ocho horas, mientras que la duración de la pausa que pueden realizar entre dos sesiones ha disminuido.
A lo largo del último mes, los traductores han protagonizado varios paros durante las reuniones de grupo. Y este martes han bloqueado por primera vez la sesión plenaria, para sorpresa del presidente de la Comisión Europea que se encontraba en el hemiciclo.
Pero los responsables de este paro no han sido los intérpretes, sino un grupo de eurodiputados que se han solidarizado con ellos bloqueando las conexiones técnicas.
Uno de ellos era José Bové, del grupo de Los Verdes, quien ha dicho a través de un tuit: "La sesión parlamentaria ha sido interrumpida. Los debates no pueden empezar sin los intérpretes. Respetetemos sus condiciones de trabajo".
Como resultado, la sesión ha empezado con media hora de retraso.