No ha aparecido ninguna prueba fotográfica de que el depuesto presidente sirio se encuentre en Moscú, a pesar de la confirmación del Kremlin y de funcionarios iraníes.
Según el análisis de Euroverify, una foto ampliamente compartida en redes sociales que supuestamente muestra al derrocado presidente sirio Bashar al Assad y su esposa en Moscú fue, en realidad, tomada en Alepo en febrero de 2023.
La agencia de noticias rusa TASS fue la primera en informar sobre la llegada de Al Assad y su familia a Moscú, después de que supuestamente huyeran de Siria el domingo, citando a una fuente del Kremlin.
Falsas afirmaciones sobre la llegada de Al Assad a Moscú
Además, Dmitry Peskov, portavoz del Kremlin, sugirió que el presidente ruso, Vladímir Putin, había concedido personalmente el asilo a Al Assad. Sin embargo, una búsqueda inversa de imágenes muestra otra realidad.
Las fotos que pretenden verificar estas afirmaciones provienen de la visita de Al Assad a un hospital en Alepo en febrero de 2023, después del devastador terremoto en la frontera entre Turquía y Siria.
El equipo de verificación de hechos de 'Euronews' ha rastreado y detectado la desinformación en plataformas como X, TikTok y Facebook. A pesar de los rumores sobre su llegada a Moscú, no ha aparecido ninguna imagen que confirme la afirmación de que Al Assad está en la capital rusa.
Incertidumbre sobre el paradero de Bashar al Assad
En las primeras horas del domingo, Reuters citó a dos altos mandos del Ejército que afirmaron que Al Assad había abordado un avión con destino desconocido. Se especuló que el avión era un Ilyushin Il-76, operado por Syrian Air, que despegó desde Damasco en la madrugada del domingo.
El rastreador de tráfico aéreo Flightradar24 proporcionó datos que indican que el avión descendió a una altitud de 1.070 metros sobre la ciudad de Homs, antes de que se desconectaran los sistemas de seguimiento.
Teorías sobre el paradero de Al Assad
Aunque no se ha podido verificar quién estaba a bordo del avión, ni hacia dónde se dirigía, circularon especulaciones infundadas sobre su destino, como que el avión se habría estrellado en las montañas sirias o que Al Ashad habría huido a Abu Dabi, en los Emiratos Árabes Unidos.
Durante los diez días del avance de los rebeldes por las ciudades sirias, los eventos dramáticos proporcionaron un terreno fértil para la propagación viral de desinformación.
El paradero de Bashar al Assad se convirtió en el objetivo de muchas afirmaciones engañosas. Finalmente, la confirmación oficial de Rusia sobre la solicitud de asilo de Al Assad en Moscú ha desmentido muchas de las teorías infundadas. Además, 'The New York Times' citó a dos funcionarios iraníes que confirmaron que Al Assad se encuentra en la capital rusa.