La Unión Europea y Canadá firman una Asociación de Seguridad y Defensa y avanzan en las conversaciones sobre un acuerdo de comercio digital horas antes de la reunión de la OTAN.
La Unión Europea y Canadá han establecido este lunes un nuevo acuerdo en materia de Seguridad y Defensa, además de iniciar negociaciones sobre un posible pacto de comercio digital durante la celebración de una reunión entre ambos bloques.
La cumbre -la vigésima de este tipo entre Bruselas y Ottawa- tiene lugar poco después de la reunión de líderes del G7 en Canadá, en la que uno de los principales titulares fue la abrupta salida anticipada del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. El pacto se produce en vísperas de una cumbre de líderes de la OTAN en La Haya en la que los aliados acordarán elevar el objetivo de gasto en Defensa del 2% al 5% del PIB, salvo que se confirme si España tiene finalmente una exención al aumento.
La cumbre ha sido "una poderosa declaración política" en palabras del presidente del Consejo Europeo, António Costa, tras reunirse con el primer ministro canadiense, Mark Carney y la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen. "Hemos acordado forjar lazos aún más fuertes", ha añadido también, estableciendo "un nivel de cercanía sin precedentes".
Junto a él, Carney ha afirmado que, con la vigente quiebra del orden internacional basado en normas, las opciones para ambos aliados son "mirar nostálgicamente hacia atrás y anhelar que el viejo orden mundial regrese de alguna manera, o construir uno nuevo con propósitos y asociaciones". El primer ministro ha añadido lo siguiente: "Como el más europeo de los países no europeos, Canadá mira en primer lugar hacia la Unión Europea".
Nuevos acuerdos en materia de Seguridad y Defensa
Uno de los principales resultados de la cumbre fue la firma de una Asociación de Seguridad y Defensa (ASPD) que permitirá trabajar conjuntamente en la gestión de crisis, movilidad militar, seguridad marítima, ciberamenazas y amenazas híbridas, cooperación industrial en materia de Defensa, así como en lucha antiterrorista, no proliferación, desarme, política espacial y apoyo a Ucrania. Según un funcionario de la UE que habló bajo condición de anonimato, "es el marco más completo que podemos ofrecer a un tercer país".
Como parte del acuerdo, Canadá también enviará un representante de Defensa a la UE, y ambas partes se comprometen a estudiar la posibilidad de establecer un acuerdo administrativo entre Canadá y la Agencia Europea de Defensa. Para Ottawa, es también el primer paso para acceder al programa de préstamos SAFE de la UE, dotado con 150.000 millones de euros para adquisiciones en el ámbito de la Defensa. Ahora habrá que negociar un segundo acuerdo bilateral para que el país pueda participar en las adquisiciones conjuntas, y para que su industria participe al mismo nivel que los fabricantes de la UE.
Von der Leyen se ha comprometido a "iniciar rápidamente conversaciones" para que Canadá pueda adherirse a SAFE, de modo que ambas partes puedan "definir dónde nuestra cooperación puede tener más valor añadido y dónde debemos canalizar las inversiones conjuntas". La presidenta ha asegurado que los principios clave en los que se basará el acuerdo serán la reciprocidad y la seguridad del suministro.
Por su parte, el canadiense Carney ha afirmado que la asociación debería ayudar a los aliados de ambos lados del Atlántico a "cumplir" los nuevos requisitos de capacidades acordados en el seno de la OTAN "con mayor rapidez y eficacia". En la actualidad, aproximadamente tres cuartas partes de cada dólar que Canadá gasta en Defensa van a parar a EE.UU., lo que, según Carney, "no es inteligente".
Se trata de la segunda asociación de este tipo que la UE establece en un mes, después de la establecida con Reino Unido, mientras Washington sigue sembrando dudas sobre su apoyo a largo plazo a los aliados de la OTAN y a Ucrania en su lucha contra la invasión rusa.
¿En qué consiste el futuro pacto sobre comercio digital?
En medio de las tensiones comerciales con EE.UU., la UE y Canadá han celebrado la anterior firma del acuerdo de libre comercio CETA en su declaración conjunta. Este tratado comercial está en vigor desde 2017: Von der Leyen ha declarado que genera en la actualidad unos 123.000 millones de euros de intercambios comerciales entre ambos lados del Atlántico. "El CETA es un símbolo del poder del comercio libre y justo", ha dicho, añadiendo que el 98% de los aranceles entre la UE y Canadá son nulos.
Basándose en este y otros pactos, ambas partes han iniciado oficialmente negociaciones sobre un Acuerdo de Comercio Digital. Se espera que éste facilite los flujos de datos y profundice la cooperación en materia de inteligencia artificial, regulación de plataformas de venta en línea, ciberseguridad y normativas digitales.
Según la declaración conjunta, ambas partes pretenden alinear sus marcos reguladores para hacer que las plataformas en línea sean más seguras e inclusivas, desarrollar sistemas de IA y establecer identidades digitales interoperables para facilitar las interacciones entre ciudadanos y empresas de ambos lados del Atlántico. También tienen previsto intensificar el trabajo conjunto sobre innovación en IA, entre otras cosas mediante la conexión de infraestructuras informáticas de alto rendimiento.
Estas negociaciones se producen en un momento en que la UE intensifica su diplomacia digital. A principios de este mes, la comisaria de Tecnología Henna Virkkunen presentó la Estrategia Digital Global del bloque, que aboga por una mayor cooperación con aliados de confianza en materia de desarrollo tecnológico y regulación.
La Comisión ya ha firmado acuerdos comerciales digitales similares con Singapur y Corea del Sur, a pesar de que los defensores de la privacidad advierten de los riesgos potenciales para los datos personales. Está previsto que el primer Consejo de Asociación Digital UE-Canadá se celebre a finales de este año.