En una entrevista con 'Euronews', el ministro de Asuntos Exteriores de Panamá, Javier Martínez-Acha, afirma que los ejercicios militares estadounidenses son temporales y que ninguna fuerza extrajera permanecerá en el territorio de forma permanente.
Panamá defiende el acuerdo de seguridad alcanzado con Estados Unidos y niega que haya cesión de soberanía. El presidente estadounidense, Donald Trump, había amenazado con volver a tomar el control del canal de Panama, lo que llevó a la firma de un Memorando de Entendimiento que ha permitido a Estados Unidos llevar a cabo una serie de ejercicios militares junto a la Policía panameña. Tres helicopteros llegaron a la zona este domingo con el objetivo de entrenarse de cara a una eventual necesidad de proterger la zona del canal.
"Nada de permanencia en nuestro territorio de fuerzas extranjeras de forma permanente. Esto es temporal", ha explicado el ministro de Asuntos Exteriores Javier Martínez-Acha, en una entrevista con 'Euronews'.
"Nosotros no tenemos presencia de tropas de ninguna nacionalidad. Nosotros hemos firmado un acuerdo de Entendimiento, como lo tenemos firmado con otros países de Latinoamérica para hacer ejercicios conjuntos con el propósito de prepararnos para amenazas asimétricas, para prepararnos en caso de que tengamos que actuar conjuntamente para contener el crimen organizado, el narcotráfico, etcétera".
Las relaciones con Washington se tensaron después de que Trump acusara a Panamá de estar cediendo a China el control de la estratégica infraestructura. Pero el canciller afirma que las tensiones han desaparecido. "Nosotros entendemos que tenemos una región privilegiada con los Estados Unidos. A veces ha sido compleja, pero hoy en día estamos cooperando muy bien desde el respeto a la integridad y a la soberanía de Panamá", afirma Martínez-Acha. Por el canal de Panamá transita alrededor del 6% del comercio marítimo mundial.
Más cooperación en materia fiscal
Martínez-Acha ha viajado hasta Bruselas para participar en el Consejo de Asociación Unión Europea-Centroamérica. Y uno de los temas que más ampollas ha suscitado a lo largo de los años es la inclusión de Panamá en la lista de países no cooperativos en materia fiscal.
Martínez-Acha niega que su país sea un paraíso fiscal y explica las garantías que ha dado a Bruselas. "Somos un país responsable. Somos un país comprometido con la transparencia y con la cooperación fiscal", explica. Pero reconoce que todavía hay tareas pendientes. "Las haremos. Estamos considerando hacer reformas en la forma como se transmite la cooperación en materia fiscal", afirma poniendo el énfasis en la necesidad de centrarse en los aspectos técnicos.
Tras un voto en el Parlamento Europeo que ratificaba una propuesta de la Comisión, Panamá ya ha logrado salir de la lista negra de países con controles deficientes sobre los flujos ilícitos de dinero. Pero sigue en la lista de países no cooperantes a efectos fiscales, en la que figuran también Rusia, Panamá o Trinidad y Tobago.
Entre las tareas pendientes figura la eliminación de los regímenes fiscales preferenciales para evitar la existencia de estructuras 'offshore' sin actividad económica genuina. "Tenemos que hacer una reforma desde el punto de vista fiscal para que si esas compañías multinacionales tienen sustancia económica en Panamá, o si esas rentas extranjeras son repatriadas a Panamá, son sujetas al impuesto". Pero apunta: "Si son repatriados a terceros países, pues no serán sujeto de impuestos".
Para Europa, Panamá no solo es estratégicamente importante en términos económicos. También lo es a la hora de evitar que se violen las sanciones contra países como Rusia.