Gabriel, el hijo mayor de Juana Rivas de 19 años, ha dirigido una emotiva carta a las autoridades españolas solicitando que paralicen la entrega de su hermano menor Daniel, de 11 años, a su padre Francesco Arcuri.
En su misiva, el hijo mayor de Juana Rivas, Gabriel, hace un llamamiento urgente: "Daniel desea ser escuchado aquí y ahora. Que atiendan su miedo sin coacciones. No permitan que lo seden y entreguen mañana, como hicieron conmigo hace ocho años".
El joven relata su propia experiencia traumática cuando fue entregado al padre italiano en 2017, a la misma edad que tiene ahora su hermano. Gabriel describe cinco años de "abuso y maltrato" hasta que logró defenderse a los 16 años, momento en que las autoridades italianas le retiraron la custodia a Francesco Arcuri debido a las evidentes heridas que presentaba el menor. Desde que cumplió 18 años, Gabriel ha luchado en los tribunales para proteger a su hermano Daniel.
El proceso judicial y las decisiones controvertidas
La entrega del menor al padre se enmarca en el cumplimiento de una resolución judicial de los tribunales italianos, avalada por la Justicia española. Daniel vivía en Italia desde 2017 y vino a España durante las pasadas navidades con un permiso especial. En ese momento, Juana Rivas solicitó a la justicia que permitiera al niño quedarse con ella, petición que fue aceptada provisionalmente.
Durante el proceso, la jueza escuchó al menor, quien expresó "terror" a volver con su padre. Sin embargo, la decisión final del Juzgado de Granada, respaldada por el Tribunal Constitucional, determina que el niño debe regresar al municipio italiano de Carloforte, estableciendo que la madre solo podrá visitarlo en Cerdeña. La entrega, inicialmente programada para el martes en un punto de encuentro familiar en Granada, fue aplazada hasta el viernes debido a que el menor se negó a irse con el padre.
Las acusaciones contra el padre y el juicio pendiente
Francesco Arcuri está siendo investigado en Italia por maltrato a sus hijos y tiene un juicio pendiente para el próximo 18 de septiembre en Cagliari por presunto maltrato habitual, físico y psicológico. Gabriel expresa su confianza en que será condenado, afirmando que "la Fiscalía aporta muchas pruebas irrefutables".
El caso ha generado gran expectación mediática y momentos de tensión, lo que llevó a la magistrada a modificar las condiciones de la entrega y posponerla al viernes. Esta se realizará en un lugar privado con la única asistencia de los progenitores, para evitar "exposiciones innecesarias" y salvaguardar "el superior interés del menor". La plataforma de apoyo a Juana Rivas ha hecho pública la carta de Gabriel, acompañada de documentos de la Fiscalía italiana sobre los delitos por los que Arcuri será juzgado.