Por Lucia Mutikani
WASHINGTON, 6 oct - Las nóminas privadas en Estados Unidos aumentaron más de lo previsto en septiembre, ya que las infecciones por COVID-19 empezaron a remitir, lo que impulsó la contratación en restaurantes y otros negocios con alto contacto humano.
Se sumaron 568.000 puestos de trabajo el mes pasado, según el Informe Nacional de Empleo de ADP, publicado el miércoles.
Los datos de agosto fueron revisados a la baja para mostrar 340.000 en lugar de los 374.000 comunicados inicialmente. Los economistas encuestados por Reuters habían previsto que habría un aumento de 428.000 puestos de trabajo en septiembre.
"Un mayor crecimiento del empleo en septiembre podría indicar que el lastre que supone el reciente aumento de los casos de coronavirus para la contratación está desapareciendo", dijo Gus Faucher, economista jefe de PNC Financial.
El aumento del empleo fue de 410.000 puestos de trabajo en promedio en el tercer trimestre, una ralentización en comparación con la media del segundo trimestre, de 748.000. El mes pasado, el sector de ocio y hostelería sumó 226.000 puestos de trabajo tras crear 155.000 en agosto.
Las nóminas del sector manufacturero aumentaron 49.000 puestos de trabajo, mientras que la contratación en las obras de construcción también subió 49.000. El crecimiento del empleo en otros sectores fue modesto.
El informe de ADP se elabora conjuntamente con Moody's Analytics y se publicó antes de que el Departamento de Trabajo entregue el viernes su informe de empleo de septiembre, más completo y más seguido por el mercado.
Aunque señaló la fuerte ralentización del crecimiento del empleo en agosto, el informe de ADP tiene un mal registro en la predicción del recuento de nóminas privadas en el informe de empleo de la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS) del Gobierno debido a las diferencias metodológicas.
"La cifra de hoy respalda en líneas generales nuestra opinión de que el mercado laboral sigue recuperándose y que el crecimiento del empleo aumentó en septiembre respecto de agosto, pero el informe de ADP no ha sido un predictor muy fiable de los datos de BLS", dijo Daniel Silver, economista de JPMorgan.
La atención se centra ahora en el informe de empleo del gobierno de septiembre, que será crucial para la Reserva Federal, después de que el banco central de Estados Unidos señaló el mes pasado que probablemente comenzaría a reducir sus compras mensuales de bonos tan pronto como en noviembre.