MADRID, 17 nov -El banco español BBVA elevó sus objetivos clave de rentabilidad y costes y dijo que añadiría 10 millones de clientes para 2024, apostando por el crecimiento en países como México y Turquía, aunque sus acciones cayeron porque los inversores se preocuparon por la exposición a las divisas emergentes.
El banco esbozó los planes para 2022-2024 en su día del inversor el jueves, apenas unos días después de que ofreciera comprar el resto del banco turco Garanti por hasta 2.250 millones de euros (2.600 millones de dólares), aprovechando la caída de la lira.
BBVA dijo que esperaba que su rentabilidad sobre fondos propios tangibles (ROTE) aumentara hasta el 14% a finales de 2024 desde el 11,7% actual, y que su ratio de costes sobre ingresos cayera hasta el 42% desde el 44,7%, incluso manteniendo las inversiones en banca digital.
Sus acciones bajaban un 5,9% a las 1400 GMT, frente a la caída del 1,1% del índice bancario europeo STOXX.
Los analistas de Credit Suisse dijeron que, aunque acogían con satisfacción la subida del objetivo de ROTE, veían que se avecinaban posibles vientos en contra como resultado de las exposiciones del banco a las divisas de los mercados emergentes, especialmente en México y Turquía.
"Seguimos siendo cautelosos en cuanto a la mayor dependencia de la nueva estrategia en Turquía, donde vemos una continua incertidumbre sobre las fluctuaciones de las divisas y una perspectiva de tipos menos favorable", dijo el banco suizo en una nota a los clientes.
NUEVO PLAN DE DIVIDENDOS
BBVA, al igual que su rival Santander, tiene dificultades para ganar dinero en los mercados más consolidados de Europa y se ha expandido en los mercados emergentes, donde ve mayores oportunidades de crecimiento.
Suponiendo una absorción del 100% en Garanti, el peso del negocio de BBVA en los mercados emergentes aumentará hasta cerca del 70%, desde el 65,6% actual.
Para hacer frente a la pandemia y a los tipos de interés ultrabajos, la entidad vendió el año pasado su negocio en Estados Unidos, generando más de 8.000 millones de euros de exceso de capital para centrarse en la reducción de costes en España y en reforzar la rentabilidad para el accionista.
El jueves, en una presentación ante el supervisor español, BBVA también dio a conocer una nueva política de distribución de dividendos anuales de entre el 40% y el 50% del beneficio ordinario consolidado, frente a la política anterior de distribuir entre el 35% y el 40%.
BBVA dijo que esta política se aplicaría con la posibilidad de combinar distribuciones en efectivo y recompra de acciones.
El consejo de administración del banco aprobó recientemente un programa de recompra de acciones por valor de 3.500 millones de euros, cuyo primer tramo de 1.500 millones de euros está previsto que se inicie a principios de la próxima semana, tras el día del inversor, según informó el presidente de BBVA, Carlos Torres, a los inversores.