GINEBRA, Suiza - El clima seco en la Unión Europea podría reducir la capacidad del bloque para ayudar a aliviar la escasez de suministro global de cereales vinculada a la guerra en Ucrania, dijeron expertos en una conferencia sobre granos.
Los precios europeos del trigo están cerca de récords ya que la invasión de Rusia ha bloqueado los puertos ucranianos y la interrupción de las exportaciones anunciada por India ha reducido aún más las opciones para los importadores.
Si bien los esfuerzos diplomáticos continúan para restaurar el acceso a los puertos marítimos de Ucrania, se considera que la cosecha de la UE de este verano boreal desempeñará un papel fundamental en el suministro de alimentos básicos.
"El mundo se enfrenta a precios de los alimentos que nunca antes habíamos visto", dijo Dan Basse, presidente de la consultora AgResource, refiriéndose al índice mundial de la agencia de alimentos de la ONU.
"Si el patrón climático de la UE no cambia y no empieza a llover en las áreas de trigo de Francia, este índice alcanzará nuevos máximos", dijo en la conferencia GrainCom en Ginebra.
Una ola de calor en Francia ha agravado la sequía en el mayor estado productor de trigo de la UE.
Noel Fryer, analista y autor de Fryers Reports, dijo que esperaba una producción de trigo duro de la UE de alrededor de 133 millones de toneladas, 3,5 millones de toneladas menos que el pronóstico del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) sobre la cosecha del bloque y muy por debajo del último año.
Las bajas existencias de trigo de la UE también limitarían el potencial exportador del bloque, dijo, y proyectó envíos de trigo en 2022/23 de 30 millones de toneladas, en comparación con un pronóstico del USDA de 36 millones.
La sequía también ha afectado las perspectivas para la cosecha estadounidense. Se espera que Rusia tenga una cosecha abundante, pero las sanciones occidentales han generado dudas sobre cuánto enviará al exterior.
Otros participantes, sin embargo, fueron menos pesimistas.
El embargo de exportaciones de India, que sorprendió al mercado a fines de la semana pasada, en la práctica parecía ser una medida del gobierno para tomar el control de los suministros en lugar de una prohibición total, dijo Gaurav Jain, director de la consultora AgPulse Analytica.
En partes de África y Asia, la importancia de las dietas de alimentos básicos como el maíz y el arroz puede permitir un menor consumo de trigo.
Un cambio hacia el maíz y otros cultivos podría eliminar potencialmente entre 5 y 6 millones de toneladas de la demanda de trigo subsahariano, dijo Mark Daniels, jefe de la firma comercial Scipio.