Casi 400 personas se ahogan cada año en Grecia en mares y piscinas y la ausencia de socorristas es una de las principales causas.
En un país como Grecia, rodeado de mar y con cientos de islas, cabría esperar que la población en general conociera y respetara las normas de seguridad para nadar. Pero, por desgracia, casi 400 personas se ahogan cada año en el país, en mares y piscinas, y casi 300 de ellas son personas mayores de 60 años.
La Agencia Nacional de Salud Pública, en colaboración con la ONG Safe Water Sports, intenta educar al público sobre las normas que hay que seguir antes de entrar en el agua para reducir los casos de ahogamiento. El ahogamiento es la segunda causa de muerte en niños desde la infancia hasta los 14 años, y la falta de socorrista es un factor clave en los incidentes de ahogamiento.
En 2024, 395 personas perdieron la vida en un medio acuático, la gran mayoría en el mar. El 68% de las víctimas mortales eran hombres. En los últimos cinco años, el único descenso de muertes se produjo en 2020, año de la pandemia en el que no hubo afluencia turística a la isla.
El mayor problema, sin embargo, está en los mayores de 70 años, ya que en 2024 254 de los 388 fallecidos pertenecían a este grupo de edad. Las autoridades griegas suelen impartir cursos a los ciudadanos sobre primeros auxilios y reanimación de víctimas de ahogamiento, ya que los primeros minutos tras ser sacado del agua son críticos.
Este año, como todos los años, también se creó un anuncio informativo con las personas mayores en el centro. En toda Europa, más de 50.000 ciudadanos europeos sufren lesiones mientras practican deportes acuáticos o actividades náuticas.