Momine Khatun aconsejó a su marido en los asuntos políticos de la ciudad de Najicheván, en Azerbaiyán.
El mausoleo de Momuna Khatun domina la línea del horizonte de la ciudad de Najichiván. Fue construido en 1186 en honor a Momuna Khatun, quien jugó un papel importante en la política local. Su tumba se sitúa en la parte subterránea del monumento.
El arquitecto Ajami Najchivani creó 10 facetas con decoraciones diferentes. Su obra principal es una joya de la arquitectura de Najichiván. En la actualidad mide 26 metros de alto, pero antes el mausoleo medía 9 metros más ya que estaba coronado con una cúpula.
Momuna Khatun aconsejó sabiamente a su marido, el poderoso gobernante local Shamsaddin Eldanis, que ordenó construir este monumento tras su muerte, aunque fue su hijo quien se aseguró de que la construcción fuera finalizada. En total, llevó 11 años. Momuna Khatun fue una mujer sabia que supo asesorar en la gestión del estado y por ello poseía una gran autoridad.
En una de las inscripciones del mausoleo está escrita la frase: "Nos vamos y solo queda el viento. Morimos y solo queda nuestro trabajo."