Un club de kárate de la localidad de Penjwin situada en el Kurdistán iraquí, cerca de la frontera con Irán, ha elegido las faldas de estas montañas nevadas como escenario para llevar a cabo sus entrenamientos al aire libre. Participan unos setenta jóvenes, hombres y mujeres, con edades comprendidas entre los seis y los veinticinco años. Los pupilos del Kikoshin Karate Club tienen que desplazarse hasta el lugar de entrenamiento en vehículos todo terreno.

Kárate para todos bajo las montañas del Kurdistán iraquí
Un club de kárate de la localidad de Penjwin situada en el Kurdistán iraquí, cerca de la frontera con Irán, ha elegido las faldas de estas montañas nevadas como escenario para llevar a cabo sus entrenamientos al aire libre. Participan unos setenta jóvenes, hombres y mujeres, con edades comprendidas entre los seis y los veinticinco años. Los pupilos del Kikoshin Karate Club tienen que desplazarse hasta el lugar de entrenamiento en vehículos todo terreno.