No hay murallas para la ambición espacial China.
PUBLICIDADNo hay murallas para la ambición espacial China. El gigante asiático ha puesto en órbita su segundo laboratorio espacial, llamado Tiangong 2 o Palacio Celestial. El lanzamiento ha tenido lugar en el desierto de Gobi y ha sido seguido por más de un millón de personas a través de internet.
El nuevo laboratorio sustituye al lanzado en 2011, que está fuera de servicio desde marzo tras sobrepasar en dos años y medio la vida útil para la que había sido programado, y orbitará a casi 400 km de la tierra. El mes que viene alojará temporalmente a dos astronautas. Se trata de un paso más dentro del ambicioso programa chino, que prevé la construcción de una estación orbital permanente para el año 2022.