La marcha terminó con un detenido y cinco policías heridos, tras los choques protagonizados por un grupo de manifestantes, que se separaron del grupo principal, y la policía.
PUBLICIDADMultitudinaria marcha en Cádiz, en el sur de España, en apoyo a la lucha de los trabajadores metalúrgicos.
La manifestación transcurrió de manera pacífica hasta última hora de la mañana, cuando miembros de piquetes levantaron barricadas y arrojaron objetos a las fuerzas del orden.
La policía respondió con balas de goma y dispersó a los manifestantes que se habían separado del grupo principal para evitar que bloquearan el tráfico, como en jornadas anteriores. La movilización terminó con un detenido y cinco agentes heridos, según fuentes policiales.
Ha sido el octavo día consecutivo de huelga indefinida y protestas.
Los trabajadores del metal exigen aumentos salariales en el nuevo convenio colectivo, acordes a la subida de la inflación, que en octubre se situó en el 5,5%.
"Esto se inició porque el convenio estaba congelado, lleva un año congelado. Y la patronal puso unos puntos sobre la mesa, que eran quitarnos dos pagas extra, la de este año y el que entra; crear una nueva categoría que es inferior a la de ayudante... Que, como todos sabemos, al final, lo que hacen es meter a los ayudantes como si fueran... por ese mismo precio, más bajo", ha explicado Saúl Trunco, coordinador de las protestas.
Sindicatos y patronal siguen negociando para lograr un acuerdo.
La industria del metal da empleo a 20.000 personas en Cádiz. Un sector clave en una provincia con una tasa de desempleo del 23%, una de las más altas de España.