Uzbekistán ha aprobado una ley que permite a los presos reducir sus penas de cárcel hasta 30 días al año, mediante la lectura de varios libros, incluidos en una lista especial. Pero el ejercicio educativo no es una opción para todos los reclusos.
Cuando Ernest Hemingway escribía 'El viejo y el mar', probablemente nunca imaginó que un día su libro se convertiría en una forma de que un preso redujera tres días su condena. Pero ahora, un preso de una cárcel uzbeka puede reducir su condena, tras demostrar ante un comité especial que ha leído el libro mundialmente famoso.
El Senado del país ha aprobado una ley que permite a los reclusos acortar sus condenas mediante la lectura. Pero hay ciertas reglas: Por cada libro aprobado que se complete, el preso podrá reducir su condena tres días, hasta un máximo de 30 días al año. La medida no se aplica a los condenados a cadena perpetua, pero según los funcionarios, más de 13.500 reclusos de todo el país podrían verse afectados.
"Estudiamos Brasil e Italia"
Shakhrizod Shokirov, funcionario del Ministerio del Interior de Uzbekistán, declaró a 'Euronews' que el país se fijó en las prácticas internacionales antes de adoptar la reforma. "En Brasil, desde 2012 los reclusos pueden reducir su condena cuatro días por cada libro leído, hasta 48 días al año. Medidas similares existen en Italia y Bolivia. Uzbekistán estudió estos resultados y decidió adaptar esta práctica a nuestro sistema legal", dijo.
El sistema será supervisado por una comisión especial. Tras leer un libro, los reclusos realizarán un examen para demostrar que han entendido el contenido. La comisión estará formada por representantes de los ayuntamientos, la sociedad civil, los organismos autónomos y las administraciones penitenciarias. Sólo los que superen el examen podrán optar a una reducción de condena.
¿Qué hay en la lista de lecturas obligatorias?
Begmat Ochilov, especialista del Centro Republicano para la Espiritualidad y la Educación, explicó a 'Euronews' que la lista de libros se diseñó para cubrir una amplia gama de campos.
"La lectura permite a los reclusos reflexionar sobre sí mismos y comprender a los demás. Esto tiene un efecto directo en su educación moral y ayuda a prevenir futuros delitos", dijo. La lista oficial incluye tanto obras uzbekas como clásicos de la literatura internacional:
- Ernest Hemingway - 'El viejo y el mar'
- Karl von Clausewitz - 'Sobre la guerra'
- Theodore Dreiser - 'Una tragedia americana'
- Erich Maria Remarque - 'Tres camaradas'
- Ray Bradbury - 'Fahrenheit 451'
- Franz Kafka - 'El proceso'
- Jack London - 'Martin Eden'
- Abdulla Qodiriy - 'O'tkan kunlar'
- 'La estrategia de desarrollo del nuevo Uzbekistán'
- 'El libro de los líderes'
Reacciones en Uzbekistán
Abogados y expertos en educación de Uzbekistán han acogido con gran satisfacción la medida. Begmat Ochilov declaró a 'Euronews' que la ley podría motivar a los presos a "dedicar su tiempo a aprender en lugar de a la ociosidad".
Los funcionarios afirman que la ley refleja un cambio en el sistema judicial uzbeko hacia la rehabilitación y la educación. Pero también subrayan que una aplicación coherente será clave para su éxito.