El viaje de David Lammy se produce dos semanas después de que el primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, firmara un acuerdo de asociación de 100 años con las autoridades ucranianas.
El ministro de Asuntos Exteriores del Reino Unido, David Lammy, llegó este miércoles por la mañana a Kiev, donde se esperaba que anunciase un nuevo paquete de ayudas para Ucrania, a medida que se acerca el tercer aniversario de la invasión a gran escala del territorio ucraniano ordenada por las autoridades rusas.
El paquete financiero pretende aporta financiación para apoyar el sector energético y las exportaciones de grano de un país que está devastado por la guerra, y contribuir a su crecimiento económico. En la agenda oficial de Lammy estaba previsto que el político británico mantuviera una reunión con el presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, en el marco de su viaje diplomático.
La visita de David Lammy se produce dos semanas después de que el primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, firmara un acuerdo de asociación de 100 años con las autoridades ucranianas. El tratado forma parte de un esfuerzo europeo más amplio por demostrar apoyo a Ucrania y reforzar el compromiso de ayudar al país a soportar el conflicto armado.
Starmer describió el histórico acuerdo como una promesa de profundizar la cooperación en materia de Defensa, en particular la seguridad marítima en el mar Báltico, el mar Negro y el mar de Azov, así como proyectos relacionados con la tecnología, como es el caso de los drones, que se han convertido en armas cruciales para ambas partes. El tratado también establece un sistema de seguimiento del grano ucraniano que Rusia ha exportado desde los territorios ocupados por sus efectivos.
Miles de millones de euros para apoyar a Ucrania en su guerra contra Rusia
Desde que comenzó la guerra que Ucraniana libra contra Rusia, el Reino Unido ha comprometido 15.400 millones de euros en apoyo militar y civil. A medida que el conflicto armado avanza hacia su tercer aniversario, tanto las tropas ucranianas como las rusas buscan ganar terreno en el campo de batalla antes de entablar posibles negociaciones de paz.
Así, Ucrania ha lanzado una segunda ofensiva en la región rusa de Kursk, donde lucha por tratar de conservar el territorio del que se apoderó el año pasado, al tiempo que incrementa los ataques con drones y misiles contra instalaciones armamentísticas y depósitos de combustible de Rusia.
Mientras tanto, las tropas enviadas por el Kremlin avanzan gradualmente a lo largo de unos 1.000 kilómetros de la línea del frente en el este de Ucrania, sufriendo numerosas bajas en los combates que tienen lugar en la zona. Por su parte, Moscú ha intensificado los ataques contra las infraestructuras energéticas de Ucrania, con el objetivo de cortar el suministro de calefacción y electricidad a la población ucraniana durante los duros meses de invierno.