Los eurodiputados han votado a favor de hacer obligatorio el microchip y el registro de todos los perros y gatos de la UE para combatir el comercio ilegal y mejorar las normas de bienestar animal.
El Parlamento Europeo ha respaldado la implantación obligatoria del microchip en todos los perros y gatos de la UE, en un intento de reducir el fraude y mejorar el cumplimiento de las normas de bienestar animal. Tras la votación de las enmiendas a la propuesta original de la Comisión Europea, la UE está un paso más cerca de establecer unas normas mínimas comunes para la cría y tenencia de perros y gatos.
Esta votación allana el camino para las negociaciones con los ministros de la UE, que ya habían adoptado su posición el año pasado. Actualmente, el registro de animales de compañía es obligatorio en 24 Estados miembros de la UE, pero los sistemas están fragmentados. Sólo una iniciativa privada, Europetnet, conecta las bases de datos nacionales y regionales de 17 países.
Los eurodiputados también proponen que los perros y gatos importados de países no pertenecientes a la UE para su venta lleven un microchip antes de entrar y se registren en una base de datos nacional. "Esto supone un claro avance contra la cría ilegal y la importación irresponsable de animales de fuera de la UE", declaró Veronika Vrecionová, eurodiputada conservadora checa que actuó como ponente del expediente.
Las organizaciones protectoras de animales celebraron la votación como un gran avance, señalando que la ley garantizará las normas básicas, incluida una alimentación adecuada, atención veterinaria y protección contra el maltrato, ayudando a eliminar la cría doméstica no regulada y las fábricas abusivas de cachorros y gatitos.
Algunas enmiendas anteriores de los eurodiputados habían suscitado preocupación por la posibilidad de facilitar el comercio ilegal. Sin embargo, las ONG de defensa de los animales confirmaron que estas cuestiones se resolvieron en la votación final en el pleno.
Los eurodiputados exigen la plena identificación y registro de mascotas
La Eurocámara fue más allá de la propuesta original de la Comisión y exigió la plena identificación y registro de todos los perros y gatos criados en cautividad, no sólo de los comercializados. "Los eurodiputados han dado por fin un paso que llevábamos años esperando y que podría acabar de una vez por todas con el comercio ilegal de animales de compañía en Europa", ha declarado Joe Moran, director de la oficina europea de Four Paws International.
Para evitar la explotación de los animales, los eurodiputados también quieren limitar el número de camadas que una hembra puede tener a lo largo de su vida. Las normas se aplicarían universalmente a todos los criadores, independientemente de su tamaño.
En particular, el Parlamento Europeo dio un paso positivo al incluir a los pequeños criadores en el ámbito de aplicación de la propuesta, según Iwona Mertin, responsable del programa de animales de compañía de Eurogroup for Animals. "Esto es significativo, especialmente en países donde el 80% de los criadores producen menos de cuatro camadas al año. Sin esto, seguiría existiendo una laguna importante", afirmó.
En la UE hay actualmente 127 millones de gatos y 104 millones de perros, y alrededor del 44% de los hogares tienen un animal de compañía. El valor anual del sector se estima en 1.300 millones de euros, según datos de la Comisión Europea.
Los eurodiputados también dejaron la puerta abierta a ampliar en el futuro las protecciones de la ley a otros animales de compañía, apoyando la creación de la llamada "lista positiva", es decir, una lista que sólo permitiría tener y vender como mascotas a las especies consideradas aptas. Se espera que pronto comiencen las negociaciones finales entre el Parlamento y los ministros de la UE, lo que supondrá la última fase antes de que pueda aprobarse la ley.