Durante el mes de junio, el más cálido desde que hay registros en España, según la Aemet, se han producido 380 muertes atribuibles a las altas temperaturas. La sofocante ola de calor que se cierne sobre Europa deja temperaturas por encima de los 46ºC en la localidad de Mora, Portugal.
En España, la ola de calor se cobra otras dos vidas. Un hombre de 52 años con patologías previas y una mujer de 53 que estaba practicando una actividad de ocio al aire libre han fallecido por golpes de calor en la provincia de Castellón y en la de Alicante, respectivamente, según ha informado la Conselleria de Sanidad.
El hombre, al parecer, tras sentirse indispuesto en el trabajo, se marchó a su domicilio, donde fue asistido por un equipo médico del SAMU, que lo trasladó al Hospital La Plana, de Vila-real (Castellón), donde falleció el pasado 1 de julio. La mujer fue asistida por otro equipo médico del SAMU en una zona de montaña de Callosa d’En Sarrià (Alicante) y trasladada al Hospital Marina Baixa, de La Vila Joiosa, donde falleció este jueves.
380 muertes atribuibles a las altas temperaturas
Tras comprobar que en ambos casos se cumplen los criterios marcados por la OMS (Organización Mundial de la Salud), la Conselleria ha informado de que las dos muertes se han producido por golpe de calor.
Durante el mes de junio, el más caluroso desde que hay registros en España, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), se han producido 380 muertes atribuibles a las altas temperaturas en todo el territorio nacional, 29 de ellas en la Comunitat Valenciana.
Grave sequía en los Balcanes
La región occidental de los Balcanes se enfrenta a una grave sequía, mientras la ola de calor que se extiende por Europa, provocada por un anticiclón africano, sigue perturbando la vida cotidiana y creando problemas en la agricultura y la electricidad.
Las temperaturas en el centro de Albania alcanzaron los 40 grados centígrados el jueves, y los meteorólogos advirtieron que no llovería hasta septiembre. Los ríos del país ya están casi secos debido a la escasez de precipitaciones durante el invierno y la primavera.
La subida de las temperaturas ha empujado a las autoridades albanesas a ayudar a la agricultura local con redes de riego. El martes finalizó un proyecto para desviar agua del río Mat, al norte del país, para regar unos 40 kilómetros cuadrados de tierras agrícolas de la zona.
El calor afecta a a la producción de energía y la sequía afecta a las cosechas
También ha habido un impacto negativo en la producción de energía de Albania, que procede principalmente de las centrales hidroeléctricas del norte del país. La empresa nacional de electricidad gastó hasta 60 millones de euros en importar energía en el primer semestre de este año.
El instituto estatal de meteorología de Serbia ha advertido de que la sequía extrema está afectando a las cosechas del país, al tiempo que ha descendido el nivel del agua en ríos y lagos. Las pequeñas ciudades y pueblos de todo el país también sufren restricciones de agua potable.
Cierra la piscina de Gërmia en Kosovo
En Kosovo, la escasez de agua cerró una piscina al aire libre en la capital, Pristina, utilizada por la gente para refrescarse en el calor del verano. La piscina de Gërmia, situada en las afueras de la ciudad y parte de un parque regional, se construyó a finales de la década de 1980 como destino recreativo y está considerada una de las más grandes del continente. El año pasado por estas fechas, la piscina recibía entre 4.000 y 5.000 visitantes diarios.
El Parque Gërmia, famoso por su belleza natural, está situado entre colinas y montañas que proporcionan a la piscina sus recursos hídricos naturales. Pero este año, el personal de la piscina no pudo proporcionar los 20.000 metros cúbicos de agua necesarios para su correcto funcionamiento.
En años anteriores, se tardaban seis días en llenar la piscina, pero este año se tardarán más de tres semanas debido a la sequía, dijo el gerente Bardh Krasniqi. "Debido a la fuerte ola de calor que afecta actualmente al país y también a la región, lamentablemente no hemos podido abrir la mayor piscina del país", dijo Krasniqi.
Como se esperaba que la temperatura alcanzara los 35 grados centígrados el jueves, el Instituto de Salud instó a la población a mantenerse alejada de la luz solar directa y advirtió a los niños, ancianos y enfermos que se quedaran en casa.
Durante la ola de calor que asoló Europa la semana pasada, se alcanzaron temperaturas abrasadoras de hasta 46,6 grados centígrados en la localidad portuguesa de Mora. Los incendios forestales también son más frecuentes en la región durante los veranos más calurosos y secos.