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Bruselas elogia los avances de Kiev en la adhesión a la UE pero advierte de "tendencias negativas"

Un miembro del protocolo intercambia banderas de la UE antes de la llegada de la presidenta de Moldavia, Maia Sandu, al Consejo Europeo en Bruselas, 4 de noviembre de 2025.
Un miembro del protocolo intercambia banderas de la UE antes de la llegada de la presidenta de Moldavia, Maia Sandu, al Consejo Europeo en Bruselas, 4 de noviembre de 2025. Derechos de autor  AP Photo
Derechos de autor AP Photo
Por Mared Gwyn Jones
Publicado Ultima actualización
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El balance anual de la Comisión Europea sobre la situación de los países candidatos en el proceso de adhesión es muy positivo para Moldavia, Ucrania, Albania y Montenegro, y menos para Serbia y Georgia.

La Comisión Europea elogió este martes el "notable compromiso" de Ucrania y sus avances hacia la adhesión a la UE, pero instó al país devastado por la guerra a revertir las recientes "tendencias negativas", especialmente en el ámbito de la corrupción.

En su informe anual sobre los progresos de los países candidatos, la Comisión "valora positivamente" las hojas de ruta y el plan de acción adoptados por Kiev a principios de año sobre el Estado de derecho, la reforma de la Administración pública y el funcionamiento de las instituciones democráticas, así como su posición negociadora sobre los grupos fundamentales.

En él se afirma que Bruselas está dispuesta a apoyar la ambición de Ucrania de cerrar las negociaciones antes de finales de 2028, pero que para ello será necesario que Kiev acelere el ritmo de las reformas. "Las recientes tendencias negativas, incluida la presión sobre los organismos especializados en la lucha contra la corrupción y la sociedad civil, deben revertirse de forma decisiva", señala el texto.

En julio, el Parlamento ucraniano, la Rada Suprema, ratificó rápidamente una ley que ponía a la Oficina Nacional Anticorrupción de Ucrania (NABU, por sus siglas en inglés) y a la Fiscalía Especializada Anticorrupción (SAPO, por sus siglas en inglés) bajo la supervisión directa del fiscal general, socavando su independencia, y que fue firmada por el presidente Volodímir Zelenski.

La medida desencadenó protestas en Ucrania y fue duramente criticada por Bruselas, lo que llevó a Zelenski a dar marcha atrás semanas después con un nuevo proyecto de ley destinado a restablecer la independencia de ambos organismos. El trabajo de la NABU y la SAPO se considera fundamental para las reformas antifraude de Ucrania, que debe cumplir para que se la considere preparada para ingresar en la UE.

Aunque la marcha atrás de Zelenski tranquilizó inicialmente a Bruselas, la cautela de este martes sugiere que el Ejecutivo comunitario sigue vigilando la evolución de la situación en el país, que en estos momentos se defiende de la guerra de agresión rusa desde hace más de tres años, para asegurarse de que las reformas contra la corrupción siguen su curso.

La invasión a gran escala de Ucrania por Rusia ha reavivado el proceso de ampliación de la Unión Europea, que lleva mucho tiempo inactivo, mientras el bloque intenta integrar a los países de su flanco oriental.

Pero los esfuerzos de Bruselas por acelerar la adhesión de Ucrania se han topado con la reacción política de Hungría. El primer ministro, Viktor Orbán, está vetando el avance de las conversaciones, alegando preocupaciones por la seguridad energética, la agricultura y los derechos de la minoría húngara en la región ucraniana de Transcarpatia.

Ucrania es uno de los nueve países que se encuentran oficialmente en la sala de espera para ingresar en la UE. Kosovo se considera un candidato potencial. "Montenegro, Albania, Moldavia y Ucrania han logrado avances significativos en el camino hacia la UE", declaró el martes por la tarde la comisaria europea de Ampliación, Marta Kos, ante la comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento Europeo.

Kos afirmó que "dado el ritmo" de las reformas, la ampliación es "una posibilidad realista en los próximos años". También instó a los Estados miembros a reconocer el trabajo realizado por los países candidatos y a "cumplir también" por su parte. Cada paso del proceso de adhesión requiere el respaldo unánime de todos los Estados miembros, lo que permite a los países de la UE vetar los avances, a menudo por cuestiones bilaterales.

Serbia y Georgia reciben duras advertencias

En cuanto a Serbia, el mayor de los cinco países de los Balcanes Occidentales oficialmente en lista de espera de la UE, la Comisión pide al Gobierno que aborde una serie de cuestiones como la corrupción, el Estado de derecho, la independencia del poder judicial, la libertad de los medios de comunicación, las reformas electorales y la desinformación extranjera.

"Serbia necesita superar el actual estancamiento político y las divisiones de la sociedad, restaurando la confianza entre los actores políticos y de la sociedad civil y creando las condiciones para un diálogo integrador, necesario para llevar adelante las reformas clave requeridas", rezan las conclusiones.

La solicitud de adhesión de Serbia al bloque se ha visto frenada por su política exterior nominalmente neutral, que persigue simultáneamente el ingreso en la UE y el mantenimiento de lazos con Moscú y Pekín. Su incapacidad para resolver el 'impasse' con Kosovo -antigua provincia serbia cuya independencia Belgrado se niega a reconocer-, así como su crisis política internason también escollos.

El informe llega justo después de que las tensiones en Serbia alcanzaran un punto de ebullición el fin de semana, un año después de que la marquesina de una estación de tren se derrumbara en la ciudad septentrional de Novi Sad, matando a 16 personas, entre ellas varios niños. El incidente mortal desencadenó un año de feroces protestas lideradas por estudiantes contra lo que consideran una corrupción desenfrenada, y muchos de ellos exigen nuevas elecciones y desafían al Gobierno de Belgrado.

Mientras tanto, Georgia se ha convertido en "un país candidato sólo de nombre", dijo Kos a los eurodiputados. "La situación se ha deteriorado gravemente, con un retroceso democrático sin precedentes en uno de los países candidatos. Hemos visto una rápida erosión del Estado de derecho y graves restricciones de los derechos fundamentales. Las autoridades georgianas deben invertir urgentemente su rumbo para responder a la demanda de sus ciudadanos de un futuro europeo", añadió.

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