Un equipo de ocho mujeres logró evacuar de manera exitosa a más de 60 ancianos con problemas de movilidad cuando el agua comenzó a invadir el edificio, evitando cualquier pérdida de vidas.
Tras el rescate, la comunidad respondió con una oleada de solidaridad. Voluntarios, bomberos, personal médico y del ayuntamiento han colaborado proporcionando alimentos, medicamentos y ayuda para la recuperación.