Unos 10.000 agricultores de los 27 países de la UE se concentraron para protestar cerca del barrio europeo de Bruselas. Los tractores avanzaron hacia los perímetros de seguridad, se bloquearon carreteras y se lanzaron fuegos artificiales, lo que llevó a la Policía a emplear cañones de agua y, en algunas zonas, gas lacrimógeno para contener a la multitud. Se arrojaron patatas y huevos mientras los agentes intentaban mantener abiertas las vías de acceso.
Los agricultores se oponen al acuerdo comercial de la UE con los países del Mercosur, que, sostienen, los expondría a una competencia desleal. Negociado durante 25 años, el acuerdo suprimiría la mayoría de los aranceles en 15 años y abarcaría un mercado de 780 millones de personas. Los manifestantes criticaron también las reformas previstas de la Política Agraria Común a partir de 2027 por temor a recortes en las ayudas.
La protesta coincidió con una cumbre del Consejo Europeo y se produjo antes del viaje previsto de Ursula von der Leyen a Brasil, lo que añadió presión política mientras los líderes debaten si modificar o aplazar el acuerdo.