Después de que en julio estallaran los enfrentamientos entre ambos países por una disputa fronteriza, las dos partes se han acusado mutuamente de romper el alto el fuego respaldado por Estados Unidos.
Tailandia ha lanzado nuevos ataques a lo largo de la frontera con la vecina Camboya tras la muerte de un soldado tailandés. Hay decenas de heridos. Tras el estallido de los combates en julio de este año, en los que murieron decenas de personas, ambas partes se acusan mutuamente de romper un alto el fuego pactado con Estados Unidos.
El Ministerio de Defensa tailandés declaró que más de 35.000 personas han abandonado las zonas cercanas a la frontera en busca de refugio y se cree que otras más han huido para alojarse con familiares en otros lugares, mientras que el ministro de Información camboyano, Neth Pheaktra, declaró que se ha evacuado a los residentes de varias aldeas cercanas a la frontera.
Los combates siguen al intercambio de disparos del domingo
El alto el fuego se tensó a principios de noviembre después de que tropas tailandesas resultaran heridas por minas terrestres, lo que llevó a Bangkok a anunciar que suspendería indefinidamente la aplicación del acuerdo. Ambas partes siguen intercambiando acusaciones sobre la responsabilidad, incluso cuando se supone que están cooperando para deshacerse de las minas.
El presidente Donald Trump comunicó a mediados de noviembre que había intervenido para preservar el actual alto el fuego mientras las tensiones entre los dos países latían a fuego lento. Pero el domingo se produjo otro breve episodio de enfrentamientos a lo largo de la frontera, tras el cual ambas partes dijeron que la otra había disparado primero.
Según el Ejército tailandés, los disparos camboyanos hirieron a dos de sus soldados y las tropas tailandesas tomaron represalias, lo que dio lugar a un intercambio de disparos que duró unos 20 minutos. Camboya dijo que la parte tailandesa abrió fuego primero y que sus propias tropas no tomaron represalias.
El lunes, el portavoz del Ejército tailandés, el general de división Winthai Suvaree, aseguró que las tropas camboyanas dispararon primero contra territorio tailandés en varias zonas. Añadió que un soldado tailandés murió y otros cuatro resultaron heridos, y que se estaba evacuando a civiles de las zonas afectadas. Tailandia utilizó aviones "para atacar objetivos militares en varias zonas para reprimir los ataques camboyanos con fuego de apoyo", dijo. Además, informó de que aceleraron el desalojo de civiles en cinco provincias fronterizas, en las que el Ministerio de Educación también ordenó hoy el cierre de 641 escuelas para "preservar la seguridad de alumnos y docentes".
La portavoz del Ministerio de Defensa camboyano, Maly Socheata, sostuvo que los militares tailandeses atacaron primero a las tropas camboyanas el lunes, y que las autoridades de Nom Pen no tomaron represalias durante los ataques iniciales. "Camboya insta a Tailandia a poner fin inmediatamente a todas las actividades hostiles que amenazan la paz y la estabilidad en la región", declaró.
El primer ministro de Malasia, vecino de la región, Anwar Ibrahim, hizo un llamamiento a la moderación en un comunicado publicado en las redes sociales y afirmó que su país está dispuesto a apoyar iniciativas para evitar nuevos enfrentamientos. "Nuestra región no puede permitirse que antiguas disputas se conviertan en ciclos de confrontación", escribió.
Siglos de rivalidad detrás de la disputa territorial
Tailandia y Camboya tienen una historia de enemistad que se remonta siglos atrás, cuando eran imperios enfrentados. Sus reivindicaciones territoriales modernas se derivan en gran medida de un mapa de 1907, elaborado cuando Camboya estaba bajo dominio colonial francés, que Tailandia sostiene que es inexacto.
En 1962, el Tribunal Internacional de Justicia concedió a Camboya la soberanía sobre una zona que incluía el templo de Preah Vihear, de mil años de antigüedad, que sigue irritando a muchos tailandeses. El alto el fuego mediado por la Administración Trump no establece una vía para resolver la base subyacente de la disputa: las antiguas diferencias sobre el trazado de la frontera.