Las infracciones del nuevo decreto acarrearán multas que oscilarán entre 1.500 euros para los particulares y 7.500 euros para las empresas.
Parece que el Gobierno francés tiene algún problema con las etiquetas de la carne de origen vegetal. Recientemente han promulgado un decreto que prohíbe el uso de términos tradicionalmente asociados a la carne, como 'filete', en las etiquetas de los productos vegetarianos.
Otros términos como 'escalope', 'jamón', 'filete' y 'costilla de primera' tampoco podrán seguir utilizándose. La decisión responde a la preocupación que desde hace tiempo suscita en la industria cárnica la posible confusión que pueden causar entre los consumidores términos como 'jamón vegetariano' o 'salchicha vegana'.
No obstante, el decreto, publicado el martes 27 de febrero, permite que algunos productos que contienen una cantidad mínima de ingredientes de origen vegetal conserven las etiquetas, entre ellos la salchicha merguez o el cordon bleu.
Las sanciones por infringir la nueva normativa de etiquetado van desde multas de hasta 1.500 euros para particulares hasta 7.500 euros para empresas. Sin embargo, el decreto concede a los productores un periodo de gracia de un año para vender sus existencias antes de enfrentarse a cualquier sanción.