Un nuevo estudio sugiere que los mayores aficionados a la música podrían tener un riesgo más bajo de demencia.
Escuchar música con regularidad en etapas posteriores de la vida podría reducir significativamente el riesgo de demencia, según sugiere una nueva investigación.
El equipo de investigación australiano analizó datos de más de 10.800 adultos de 70 años o más y halló que quienes escuchaban música con regularidad tenían una probabilidad un 39% menor de desarrollar demencia en comparación con quienes nunca o solo ocasionalmente escuchaban música.
Quienes siempre escuchaban música no solo registraron una menor incidencia de demencia, también una reducción del 17% del deterioro cognitivo, puntuaciones cognitivas globales más altas y una memoria episódica mejorada, la que se utiliza al recordar hechos cotidianos.
Por su parte, tocar un instrumento musical también se vinculó a beneficios para la salud cerebral, una reducción del 35% del riesgo de demencia. Quienes escuchaban y además tocaban música presentaron un riesgo de demencia un 33% menor y un riesgo de deterioro cognitivo un 22% inferior.
Los hallazgos sugieren que "las actividades musicales pueden ser una estrategia accesible para mantener la salud cognitiva en las personas mayores", dijo Emma Jaffa, una de las autoras del estudio en la Universidad Monash.
No obstante, los autores advirtieron que sus resultados son observacionales y no pueden probar que escuchar música reduzca realmente el riesgo de demencia o mejore el bienestar cognitivo.
El estudio presenta limitaciones, entre ellas el posible sesgo de selección, la dependencia de hábitos musicales declarados por los propios participantes y la posibilidad de causalidad inversa, todo lo cual "subraya la necesidad de interpretar los resultados con cautela", señalaron.
Apuntaron que futuras investigaciones podrían analizar si algunos tipos de música se relacionan más estrechamente con un menor riesgo de demencia.
El estudio llega mientras el impacto de la demencia sigue creciendo en todo el mundo. Más de 57 millones de personas conviven con la enfermedad, entre ellas unos 9,8 millones en Europa. Se espera que esa cifra aumente en las próximas décadas.
Según Alzheimer's Disease International, cada año se registran más de diez millones de nuevos casos de demencia, lo que equivale a un caso nuevo cada 3,2 segundos.