Damasco intensificó su ataque contra el último gran bastión de los rebeldes después de que la cumbre ruso-iraní-turca no lograra acordar un alto el fuego.
Los helicópteros del ejército sirio lanzaron barriles bomba, llenos de explosivos y metralla al sur de Idlib.
El ejército sirio niega haber usado barriles bomba. Sin embargo, los investigadores de las Naciones Unidas han documentado ampliamente su uso por el ejército.