El evento, organizado por el grupo Fluss Bad Berlin, ha sido registrado como una protesta para eludir una prohibición centeneria, en vigor desde 1925, debido a la contaminación.
Los bañistas aseguran que la calidad del agua ha mejorado significativamente y que es controlada regularmente, con los trabajadores municipales considerando reabrir partes del río a los nadadores para 2026.
El grupo propone un tramo de 1,8 kilómetros sin embarcaciones cerca de la Isla de los Museos, poniendo la reapertura de partes del Sena en París como modelo.