La tormenta, que golpeó por primera vez las áreas de Rávena y Ferrara poco después de la 1:00 del domingo, se movió hacia el sur a lo largo de la costa, azotando Milano Marittima, Cesena, Bellaria-Igea Marina, Rímini, Riccione y Cattolica. Rímini registró casi 80 milímetros de lluvia, mientras que fuertes ráfagas de 120 kilómetros por hora arrancaron árboles y dañaron propiedades.
Milano Marittima fue una de las áreas más afectadas, donde los pinos caídos bloquearon carreteras y dejaron coches varados. Las inundaciones también forzaron el cierre de calles principales en Cervia. El transporte por carretera y ferrocarril se vio interrumpido en toda la región.