La natación en aguas frías está ganando popularidad en Opatija, un histórico destino de bienestar en la costa adriática de Croacia.
La práctica, impulsada localmente desde hace más de dos décadas, se ha convertido en una tradición invernal arraigada y atrae tanto a residentes como a turistas.
El atractivo de Opatija se basa en su clima templado, el aire marino limpio y su legado del siglo XIX como balneario costero.
Hoy, la ciudad sigue reforzando este legado mediante centros médicos, instalaciones termales y su pintoresco paseo Lungomare, de 12 kilómetros, que conecta localidades costeras y favorece las actividades al aire libre durante todo el año.