Las comunidades al norte de Sídney, en la región de Nueva Gales del Sur, se enfrentan a lluvias incesantes desde el martes, con algunas áreas recibiendo aportes de hasta 600 l/m² de lluvia. Los servicios de emergencia han llevado a cabo más de 500 operaciones de rescate, utilizando helicópteros para alcanzar tejados.
Taree, Kempsey y Coffs Harbour se encuentran entre las ciudades más afectadas, con 50.000 residentes a los que se les ha dicho que se preparen para la evacuación o el aislamiento. Se han abierto 14 centros de evacuación y las autoridades advierten de que las malas noticias continuarán, ya que los pronósticos predicen más lluvias.