Las llamadas "protestas de la Generación Z", impulsadas por jóvenes expertos en internet, son las más grandes del país en años y se han extendido a pesar de carecer de autorización. La ira está dirigida contra la supuesta corrupción y el abandono de escuelas y hospitales, en contraste con los miles de millones gastados en torneos de fútbol.
En Salé, cerca de Rabat, adolescentes enmascarados incendiaron coches y tiendas, mientras que también se reportaron disturbios en Inzegane, Ait Amira y Oujda, donde un vehículo policial embistió a los manifestantes. Las autoridades informaron que 409 personas han sido arrestadas desde el sábado, con más de 280 personas heridas, incluidas fuerzas de seguridad y civiles. Al menos 142 vehículos policiales y 20 coches privados han sido dañados.
Amnistía Internacional instó a las autoridades a abordar las demandas de los manifestantes, mientras que los organizadores en Discord pidieron calma. Los cánticos de "Los estadios están aquí, pero ¿dónde están los hospitales?" reflejaron el creciente descontento mientras Marruecos se prepara para acoger la Copa Africana de Naciones y el Mundial de 2030.