Con el desbordamiento de los ríos Thu Bon y Vu Gia, localidades enteras cerca de Da Nang quedaron incomunicadas.
Las intensas lluvias han convertido las antiguas calles de Hoi An en ríos, lo que ha obligado a las autoridades a evacuar a residentes y a miles de turistas.
Mientras los vecinos se apresuraban a salvar sus pertenencias, empezaron a recurrir a barcas en lugar de motos, ya que zonas de la ciudad histórica siguen anegadas bajo dos metros de agua.
Los equipos locales siguen en máxima alerta, decididos a proteger vidas en plena temporada de tormentas, cada vez más intensa en Vietnam.