Decenas de activistas filipinos exigieron este martes en Manila una disculpa formal por parte del Gobierno de Japón por haber forzado a mujeres y niñas a trabajar en burdeles en la época de la guerra.
Los presentes encendieron velas y colocaron flores frente a una iglesia de la capital filipina. Cerca de mil mujeres fueron esclavizadas durante la ocupación japonesa del país durante la década de 1940.