Si aún no ha usado todos sus días de vacaciones, no está solo. ¿Por qué tantos europeos los retrasan y qué países son los más reticentes?
Se acerca el fin de año y, sin embargo, muchos trabajadores europeos aún no han decidido cómo utilizar sus vacaciones anuales restantes. Una nueva encuesta realizada por la empresa de servicios de pago Mastercard entre 20.000 personas de 21 países europeos muestra que casi la mitad (47%) aún necesita tomarse entre siete y 20 días libres.
A la mayoría le gustaría utilizar estos días para viajar a un nuevo destino "de ensueño" (40%), seguido de un 10% que quiere asistir a un espectáculo en directo, y un 9% que desea disfrutar de actividades al aire libre o de los mercados navideños.
¿Qué les frena? Según la investigación, la razón más común (23%) es económica: necesitan más tiempo para ahorrar dinero o presupuestar sus viajes. El mayor porcentaje de respuestas de este tipo procede de Serbia (40%), seguida de Bulgaria (33%), Rumanía (32%), Croacia (27%) e Irlanda (27%).
Los ciudadanos neerlandeses, alemanes, suizos, checos y chipriotas parecen ser los menos afectados por las finanzas a la hora de tomarse el resto de sus vacaciones. Al contrario, algunos de ellos, como los neerlandeses, esperan a encontrar la oferta perfecta antes de reservar (14%). Lo mismo ocurre con los británicos, portugueses, franceses y, sobre todo, croatas (15%).
Al mismo tiempo, el 12% de los consumidores afirma que aún no ha reservado ninguna experiencia navideña en particular porque está ocupado con el trabajo o las obligaciones familiares, lo que quizás explique por qué la Generación X es el grupo de edad menos propenso (57%) a marcar una experiencia de la lista de deseos antes de fin de año, mientras que el 74% de la Generación Z está decidida a utilizar su tiempo libre de esta manera, superando a los milenials (69%).
Británicos y neerlandeses, los menos dispuestos a viajar en Navidad
En general, los investigadores afirman que un número significativo de europeos sigue siendo optimista al respecto, ya que más de dos tercios (67%) creen que cumplirán sus últimos objetivos antes de que acabe el año.
Algo menos de un tercio (30%) sigue deseando hacerlo, pero dice no estar seguro de lograrlo. Las esperanzas no son muchas en el Reino Unido, donde sólo el 34% piensa disfrutar de otra experiencia de ocio antes de 2026, el porcentaje más bajo de los países encuestados, seguido de Países Bajos (41%), Bélgica (46%), Irlanda (49%) y Francia (51%).
¿Qué sacrifican los europeos para vivir experiencias más valiosas?
Los europeos reconocen cada vez más el valor de las experiencias: el 81% cree que el dinero gastado en ellas siempre merece la pena, según el estudio. Según los investigadores, algunos consumidores "ajustan deliberadamente sus presupuestos y hacen concesiones conscientes" para poder salir de casa.
En este sentido, lo primero que suele desaparecer es la ropa, que el 40% de los consumidores recorta para poder permitirse sus escapadas. El hacha de guerra también cae sobre los restaurantes (39%) y los caprichos de lujo (32%), mientras que el 32% renuncia a los aparatos tecnológicos y el 25% a mejorar la decoración de su hogar para liberar su presupuesto de vacaciones y experiencias.