El festival es uno de los más importantes del calendario hindú, con los fieles creyendo que Ganesha elimina obstáculos y trae prosperidad. Se instalan ídolos decorados en hogares y en altares públicos temporales, donde se realizan oraciones y ofrendas.
En Nueva Delhi, los devotos llevaron un ídolo de Ganesha en una procesión acompañada de tambores y danzas.
El festival concluye el 6 de septiembre con la inmersión de los ídolos en ríos y mares, simbolizando el regreso del dios a su morada mítica.