El volcán Kilauea, en Hawái, entró de nuevo en erupción el domingo y lanzó al aire una alta columna de lava y gas, en su 36.ª erupción desde diciembre de 2024. El Servicio Geológico de Estados Unidos indicó que el volcán expulsó lava durante unas cinco horas, con fuentes que se elevaron hasta 330 metros de altura.
El código de aviación naranja se mantuvo vigente mientras la roca fundida seguía fluyendo dentro del cráter de la cumbre, en el Parque Nacional de los Volcanes de Hawái. Los científicos señalaron que la erupción no suponía una amenaza para las comunidades cercanas, ya que la lava permanecía contenida.
Kilauea, uno de los volcanes más activos del mundo, ha estado entrando en erupción a intervalos regulares desde hace casi un año. Cada episodio sigue la misma ruta subterránea, lo que ofrece a los expertos nuevas claves sobre el comportamiento a largo plazo del volcán.