Las Fuerzas Armadas de Colombia han reforzado su presencia en el municipio de Buenos Aires, en el suroeste del departamento del Cauca, después de que un ataque con explosivos contra una comisaría dejara ocho policías heridos.
El Gobierno responsabilizó a disidentes de la antigua guerrilla de las FARC que rechazaron el acuerdo de paz de 2016.
El Ejército informó de que ha desplegado pelotones adicionales y aeronaves armadas para apoyar las operaciones terrestres, incluida la desactivación de explosivos en las zonas altas de la localidad.
Las autoridades señalaron que el objetivo es restablecer el control tras un ataque con dron y explosivos que dañó viviendas, carreteras, un hospital y un banco.