Michaela Benthaus, una ingeniera alemana parapléjica, se ha convertido en la primera persona en silla de ruedas en viajar al espacio, tras participar en una misión suborbital de Blue Origin lanzada desde el oeste de Texas.
El vuelo de diez minutos, que ofreció más de tres minutos de ingravidez, solo requirió ajustes menores en la cápsula New Shepard, concebida con la accesibilidad en mente.
Blue Origin incorporó un sistema de transferencia para ayudar a Benthaus, 33 años, que resultó herida en un accidente de bicicleta de montaña hace siete años. La misión privada pone de relieve los crecientes esfuerzos por hacer los vuelos espaciales más inclusivos.