Los ciudadanos de los Países Bajos celebraron el 161º aniversario de la abolición de la esclavitud con una ceremonia nacional en el Oosterpark de Ámsterdam. Al evento asistieron cientos de personas, entre ellas diez miembros del gabinete saliente de Mark Rutte.
En su último día de trabajo, el primer ministro, Rutte, depositó una corona de flores en nombre de su equipo gubernamental. Martin Bosma, presidente de la Cámara de Representantes, no asistió después de que el Instituto Nacional para la Historia y el Patrimonio de la Esclavitud en los Países Bajos, NiNsee, le retirara la invitación por sus polémicas declaraciones sobre la esclavitud. La preocupación por posibles altercados durante la ceremonia influyó en la decisión.