Durante un vuelo histórico sobre El Hierro, en las Islas Canarias, Peter Salzmann logró algo que durante mucho tiempo se consideró fuera del alcance con un 'wingsuit' sin propulsión, en lugar de perder altura, ascendió. Con la ayuda de un perfil aerodinámico diseñado junto al equipo Advanced Technologies de Red Bull, aprovechó la ascendencia de ladera para ganar altura con vientos que normalmente serían demasiado débiles para lograrlo.
Ese perfil funciona de manera similar a una hidroala, le permite volar cerca de la velocidad de pérdida y seguir generando sustentación.
Su primera prueba desde la Jungfrau en 2024 ya apuntaba a lo que el sistema podía hacer. El salto en El Hierro lo confirmó, demostró que podía ascender, virar y mantenerse en el aire, un avance que acerca el vuelo con traje de alas al planeo propio de las aves.